Todos estamos de acuerdo en que vinimos al mundo a ser felices. O al menos a intentarlo. Pero, ¿qué pasa cuando un dolor intenso te arruina el día? O peor, ¡te ataca por semanas o meses! En La Rebaja Droguerías queremos que te sientas bien todos los días. Por eso, te contamos todo acerca de los tipos de dolor que una persona puede llegar a experimentar en su vida.
¿Qué es el dolor?
Básicamente, es una señal del cuerpo de que algo no anda bien. Una sensación desagradable como un pinchazo, un hormigueo, una picadura, un ardor o una molestia. Además, es un problema que afecta la calidad de vida.
Según la Asociación Colombiana para el Estudio del Dolor (ACED), en Colombia, 1 de cada 3 adultos padece dolor crónico. La mayoría de las veces este es severo y dura más de 6 meses, afectando su trabajo, sus emociones, su sueño y su vida social y sexual como consecuencia.
Tipos de dolor
Duración
- Dolor agudo: de aparición brusca. Es un sistema de alarma que indica que hay una enfermedad o lesión. Casi siempre, es causado por accidentes, golpes o un problema en los intestinos. Por ejemplo, la apendicitis.
- Dolor crónico: no tiene un límite en el tiempo. Es por sí solo una enfermedad y cuando inicia puede prolongarse durante toda la vida, como en el caso de las personas con cáncer.
Causa
- Dolor neuropático: producido por daño en el cerebro o por una lesión en un nervio. Se presenta con sensación punzante, quemante u hormigueo. Incluso hay pérdida de la sensibilidad o se percibe un dolor exagerado con nada más rozar la zona afectada. Ejemplo de esto, el causado por las hernias en la columna.
- Dolor psicógeno o psicológico: es originado por el ambiente social y el estrés en que vive la persona. El medicamento nunca es suficiente para mejorarlo, pues con el tiempo se va necesitando más cantidades.
Localización
- Dolor somático: se produce en la piel, los músculos, los huesos, las venas y las arterias. Está bien localizado y se siente punzante. Los más comunes son los dolores musculares y el dolor musculoesquelético, causados por fatiga o movimientos bruscos.
- Dolor visceral: lo produce la lesión en los órganos internos (intestinos, corazón, pulmones). Es continuo y profundo, difícil de localizar; se percibe lejos de su origen. Por ejemplo, los cólicos.
Intensidad
- Leve: permite realizar las actividades cotidianas.
- Moderado: interviene con el funcionamiento normal de la persona; se necesita tratamiento.
- Severo: no permite el descanso; se necesitan medicinas más fuertes.
Curso
- Continuo o de fondo: es permanente durante el día; no disminuye en al menos 12 horas.
- Irruptivo: significa que empeora por momentos, a veces con el movimiento o de manera espontánea.
Medición del dolor
Cada persona lo percibe de manera diferente, a esto se le conoce como “umbral del dolor”. Significa que la intensidad que se percibe depende de qué tanta sensibilidad tenga el cuerpo. Se piensa que la mujer tiene mayor resistencia al dolor, debido a que es capaz de soportar el parto. ¡Así es! Pero ella siente dolor con estímulos más suaves que el hombre.
Escalas para medir diferentes tipos de dolor en niños
No es tarea fácil para un padre. El médico usualmente les pregunta qué tanto suponen que le duele al pequeño. Según la Asociación Española de Pediatría (AEP), hasta los 7 años es difícil que un niño comunique claramente cuánto le duele. Sin embargo, el niño tendrá conductas anormales. Mientras más intensas sean estas, consideramos que el dolor es mayor. Por ejemplo:
- Llanto o quejido inexplicado.
- Menor actividad.
- Rechazo a los alimentos
- Búsqueda de contacto con los padres más de lo habitual.
- Que se lleve de forma repetida la mano hacia alguna parte de su cuerpo, la sujete o evite rozarla con alguna otra cosa.
- Evita su actividad normal, como jugar en el parque o en la casa, hacer deporte, ir al colegio, etc.
También existen escalas elaboradas por psicólogos. Estas ayudan a padres y cuidadores a entender qué tanto dolor siente el pequeño. Se clasifican normalmente como escalas subjetivas (con información que nos da el menor) y objetivas (con la observación del adulto).
Escala objetiva del dolor
La más usada es la escala FLACC, la cual se utiliza en niños de meses. Esta sirve para que el padre o la persona que lo cuida pueda medir el dolor:
Escala FLACC | |||
Clasificación | |||
0 | 1 | 2 | |
Cara | Ninguna expresión, sin sonrisa, desinteresado. | Mueca ocasional, frunce el ceño, reservado. | Frunce el ceño frecuentemente o de manera constante. Mandíbula apretada, barbilla temblorosa. |
Piernas | Posición normal o relajada | Intranquilas, inquietas, tensas. | Da patadas, baja y sube las piernas. |
Actividad | Acostado tranquilo, en una posición normal, se mueve fácilmente. | Se retuerce, cambia de postura, tenso. | Se arquea, está rígido o se sacude. |
Llanto | No llora (ni cuando está despierto, ni cuando está dormido). | Gime o lloriquea, se queja de vez en cuando. | Llanto constante, chillidos o sollozos, quejas frecuentes. |
Capacidad para sentir alivio o consuelo | Contento, relajado. | Se tranquiliza al tocarlo, arrullarlo o al hablarle. Se le puede distraer. | Dificultad para consolarle o reconfortarle. |
Fuente: Asociación Española de Pediatría |
El tutor del niño debe escoger una de las opciones en cada sección. Luego, se suma el puntaje que se da de 0 a 2. El máximo posible de alcanzar es 10, que en ese caso sería un dolor intenso. Mientras que 0 es la ausencia de este.
Escala subjetiva del dolor
Esta escala sirve en niños mayores de 5 años y es más fácil de usar. Esto se debe a que son ellos mismos los que nos indican cómo se sienten. Para eso, se les pide escoger un dibujo de la escala, el cual exprese cuánto le duele. Estos dibujos tienen un valor del 0 al 10, siendo este último el de mayor intensidad. La más usada es la escala llamada Wong-Baker:
Medición del dolor en adultos
Debido a que no existe ningún análisis que determine cuánto dolor sentimos, somos nosotros mismos quienes damos un valor. Normalmente, si vamos al médico, este nos preguntará qué tan intenso es del 1 al 10, siendo 1 el más leve y 10 el peor que podamos imaginar. Otra manera de describirlo es en escala de leve, moderado e intenso.
En definitiva, son muchos los tipos de dolor. Y a pesar de ser un síntoma tan común, no debe ser menospreciado. En todas sus formas e intensidades, es una alerta del cuerpo de que algo no anda bien. Recuerda que la información brindada en este artículo no sustituye en ningún momento la valoración por un especialista. Si presentas alguno de los tipos de dolor, acude a tu médico. Cuida tu salud y la de tu familia.