Al hablar de los bebés recién nacidos es inevitable no pensar en el porteo. Sabemos que una de tus prioridades es tener a tu bebé siempre cerca y que no le falte nada.
Por eso, te contamos en qué consiste esta práctica, qué beneficios tiene para el bebé y para ti, además de cómo puedes llevarla a cabo de manera segura.
Porteo: conexión y tranquilidad
Durante los nueve meses que tu bebé estuvo en la panza, permanecieron conectados todo el tiempo a través del cordón umbilical. Ahora que llegó al mundo, esto no tiene por qué cambiar.
A través del porteo es posible que tu bebé pueda estar cerca de ti, sintiendo tu corazón, mientras haces las actividades del día a día. Esta práctica consiste en cargar al bebé sin necesidad de ocupar tus manos.
Este método tiene gran fuerza, sobre todo en América Latina, pues los indígenas cargan a sus bebés amarrados a sus cuerpos. Esto lo hacen con grandes trozos de tela (Eres Mamá, 2020).
Una de las formas en las que puedes hacerlo es con mochilas, bandoleras o fulares. Este último, sobre todo, favorece la buena posición para el bebé debido a que, queda a nivel de nuestro ombligo y su cabeza debajo de nuestra barbilla (Algueró, 2023). A su vez, esta posición puede ayudar a evitar el reflujo en bebés.
¿Por qué hacer esta práctica?
Los beneficios que tiene esta práctica para tu bebé son (Algueró, 2023):
- Lloran menos y duermen mejor. Se ha demostrado que los bebés que usan esté método son más tranquilos, aumentan más rápido de peso y tienen un mejor descanso.
- Su desarrollo psicomotor es mejor. Al estar en un constante balanceo, los bebés pueden llegar a tener mejor equilibrio y control de su postura. Esto le ayudará al momento de dar sus primeros pasos.
- Disminución de los cólicos. Una de las mayores dificultades son los cólicos en bebés. Por eso, el porteo es fundamental para mejorar esto, ya que siempre está en posición vertical. Igualmente, contribuye a que el bebé sea más sociable.
En cuanto a los beneficios que tienen los padres están (Algueró, 2023):
- Fortalecimiento del vínculo y la seguridad.
- Aumento de oxitocina, lo que beneficia la lactancia materna.
- Tonificar los músculos de la espalda.
Tips para que hagas un porteo seguro
Para tener un momento pleno y seguro junto a tu bebé es necesario que sea ergonómico. Es decir, que respete la composición fisiológica que tiene el bebé. Además de eso (Romero, 2021):
- Es importante que te asegures de que la curvatura de la columna se respete. Esta debe mantenerse en forma de “C”.
- Las piernas del bebé, desde la cadera, deben formar una “M”. Además, es necesario que veas que las rodillas siempre estén más elevadas que la cadera.
- La cabeza del bebé debe estar a la altura de tu barbilla.
- Mantén la nariz y boca del bebé sin ninguna presión. Es decir, su barbilla no debe estar hacia el pecho. Así, podrá respirar adecuadamente.
- Aunque siempre esté contigo, asegúrate de que el fular esté bien puesto y que el bebé se sienta cómodo.
Ahora que tienes más claridad sobre el porteo, cómo hacerlo de forma segura a la vez que genera un gran vínculo entre mamá y bebé, mantenlo siempre cerquita de ti.
