Limpiar vidrios llega a ser de lo más satisfactorio y hasta divertido, si lo haces de la forma correcta. Nada más gratificante que ver esos cristales relucientes y luminosos, después de aplicarles el tratamiento adecuado.
No tienes que emplear ni mucho tiempo, ni mucho dinero para limpiar vidrios a la perfección. Con unos productos básicos y la técnica correcta, vas a dejarlos como nuevos. ¿Cómo hacerlo? Sigue leyendo porque aquí te lo contamos.
La importancia de limpiar vidrios
Si sabes qué es el feng shui, no necesitas leer esta sección. Si no lo sabes, te contamos que se trata de una sabiduría milenaria, nacida en China. Su función básica es la de armonizar los espacios para que la energía fluya de manera correcta.
Pues bien, según el feng shui, los cristales sucios represan las energías y no les permiten salir. Por ejemplo, una ventana manchada puede hacer que la energía de un espacio se vuelva muy pesada (AFA, 2019). ¿Ves la importancia de esta limpieza?
Limpiar vidrios: ¿qué necesitas?
Es posible limpiar vidrios a la perfección con elementos de la vida cotidiana. Hay muchas formas de hacerlo, pero aquí te vamos a hablar de una de las más sencillas y eficaces. También es la más ecológica.
Implementos necesarios
Lo único que vas a necesitar es lo siguiente:
- Agua destilada.
- Vinagre blanco y limón.
- Bicarbonato de sodio (si hay manchas muy pronunciadas).
- Unas gotas de alcohol.
- Una esponja.
- Dos paños de microfibra.
La técnica para limpiar vidrios
Lo primero es evaluar qué tan sucios y manchados están los vidrios. Si se trata de una limpieza normal, solo sigue estos pasos:
- En una taza de agua destilada caliente vierte una cucharada de vinagre blanco y dos cucharadas de jugo de limón.
- Con un paño de microfibra limpio, retira el polvo superficial. Si quieres un acabado perfecto, moja el paño con unas gotas de alcohol.
- Sumerge la esponja en la mezcla y pásala sobre el cristal, de izquierda a derecha o de arriba abajo. Siempre en un solo sentido.
- Limpia con el otro paño de microfibra.
Los casos especiales
Algunas veces no solo tienes que limpiar la casa, sino que también debes retirar las horribles manchas de los cristales. En esos casos se requiere un tratamiento especial.
¿Cómo hacerlo?
El procedimiento es igual al del punto anterior, pero esta vez debes usar bicarbonato de sodio. Mézclalo con agua destilada caliente y aplícalo sobre la superficie del vidrio.
En caso de que esto no funcione, lo mejor es que cambies el bicarbonato por amoniaco. Asegúrate de usar guantes y gafas o careta de protección si te decides por ese método.
Bonus: trucos y consejos
Lo más aconsejable es que después de aplicar el líquido sobre el vidrio, esperes cinco minutos antes de limpiar. Si hay manchas rebeldes, espera 15 minutos.
Es mejor que hagas la limpieza en días opacos. Si hay mucho sol, es posible que el líquido seque muy rápido y queden unas feas huellas sobre el cristal.
Sigue nuestros consejos y tendrás unos vidrios limpios y relucientes todos los días. No dejes de hacer la limpieza en forma regular.
¡Qué siempre brillen esos cristales!